lamentablemente el audio de este mensaje se daño, sepa disculparnos...
MENSAJE
SÁBADO 01/04/2017
Por el Hno. Gabriel.-
Introducción
Jeremías 9:23 Así dijo Jehová: No se alabe el sabio en su sabiduría,
ni en su valentía se alabe el valiente, ni el rico se alabe en sus riquezas. 24 Más alábese en esto el que se
hubiere de alabar: en entenderme
y conocerme, que yo soy Jehová,
que hago misericordia, juicio y justicia en la tierra; porque estas cosas
quiero, dice Jehová.
Es Dios mismo
quien les habla directamente a los hombres en este pasaje y les dice que la
gloria de ellos (el motivo de alabanza) consiste
solamente en conocerle a Él, no en el dinero ni en la sabiduría ni en la
valentía. Ahora en virtud de esta declaración que proviene de la boca de Dios;
¿Cuantos se atreven a pararse hoy delante de Dios y de los hombres y jactarse diciendo;
¡Yo soy uno de los que ha entiendo a Dios y le ha conocido en su esplendor!? Comprendiendo
que aquí la palabra “conocer” no está
haciendo referencia a conocimiento escritural de Dios por medio de la ley (la tora) o de la historia sino a “conocer” de haber “experimentado” la presencia de Dios en su vida y haber degustado su
manifestación gloriosa, entonces ¿Cuántos
pueden decir que lo han alcanzado?…
¿Es esto posible hoy? Es fácil pensar que esto ya no sucede, pero ¿qué pasaría si esto estuviera vigente hoy? ¿Te atreverías a ir por esa gloria de conocer a Dios? ¿Qué hay que hacer?;
Juan
14:21 El que tiene mis mandamientos, y
los guarda, ése es el que me ama; y el que me ama, será amado por mi Padre, y
yo le amaré, y me
manifestaré a él (del gr. mostrar, revelar, aparecerse).
Y no se refiere a
visiones fantasmagóricas o manifestaciones estrambóticas como la de los
pentecostales de hoy que hacen el ridículo y luego nada cambia en sus vidas, sino
se trata de conocer a Dios por medio de experimentar su presencia a través de
una comunión intima con Él, por medio de
la oración, la lectura, la meditación y la práctica, en donde Él se manifiesta
con su Espíritu, experiencia que SI transforma la vida de las personas
hacia la santidad e imagen de Cristo, experiencia que a la fecha sigue vigente
y es demanda por Él, sin embargo lo curioso y lamentable es que casi nadie (me refiero a los cristianos actuales) quiere
ir en pos de esa meta (soy como un
heraldo que sale a proclamar la carrera de conocer a Dios y buscar
competidores…), a sabiendas que existe tal comunión con Él o tal
conocimiento de Él igual nadie quiere correr a Cristo a fin de conocerle, y
esto es lo que me propongo predicar en esta tarde; mensaje que he titulado “A fin de conocerle”
Desarrollo
Reconozco que es
un tema bastante delicado y complejo por la mala interpretación que se tiene
del asunto, pero quiero enfatizarlo desde un pasaje exclusivo que va a ser el parámetro
para hablar de este tema y a su vez el centro de este mensaje, se trata de todo
el capítulo 3 de la carta a los Filipenses;
Filipenses 3:9 y ser hallado
en él, no teniendo mi propia justicia,
que es por la ley, sino la que es por la fe de Cristo, la justicia que es de
Dios por la fe; 10 a fin de conocerle, y el poder de su resurrección, y la participación de
sus padecimientos, llegando a ser
semejante a él en su muerte, 11 si en alguna manera llegase a la
resurrección de entre los muertos. 12
No que lo haya alcanzado ya, ni que ya sea perfecto; sino que prosigo, por ver si logro asir aquello
para lo cual fui también asido por Cristo Jesús.
Cómo puede un
hombre como Pablo, el cual conoció a Jesús personalmente y experimento otras
tantas manifestaciones de Cristo en su vida, escribir esta expresión; “a fin de conocerle”, si hacemos un
breve repaso de su vida vemos que; Jesús se le apareció camino a Damasco (Hch 9:3-5), le hablo en visión estando
en Corinto (Hch 18:9-10), se le
pareció en la cárcel cuando estaba preso en Jerusalén dos años antes de ir a
Roma (Hch 23:11), el ángel del
Señor estuvo con Él en el barco que lo llevaba a Roma antes del naufragio (Hch 27:22-24), fue arrebatado en el
espíritu hasta el tercer cielo (2°Co 12:2),
el Espíritu le hablo en más de una ocasión y tuvo visiones departe de Dios (Hch 16:6-10), sin embargo, como si todo
esto fuera poco, siendo de aproximadamente 55 o 56 años de edad y luego de
haber vivido todas estas experiencias escribe esta expresión que nos descoloca;
“a fin de conocerle” ¿Acaso Pablo con
todo lo vivido considera no conocer a Jesús? Si es así entonces ¿Qué queda para
nosotros? ¿Qué clase de hombre es este que luego de tenido todas estas experiencias
no se conforma con lo que ha alcanzado? o ¿A qué se refiere Pablo cuando escribe
“a fin de conocerle”? ¿Cuál es el
contexto aquí, de qué viene hablando él?
Recomendaciones para evitar el legalismo
infructuoso
Para comprender
mejor esta expresión de Pablo vamos a abordar todo el capitulo 3 el cual nos dará
el contexto de lo que queremos analizar: Entonces, en los primeros versos del
capítulo Pablo comienza con una serie de recomendaciones a los filipenses
diciéndoles que se cuiden de los “perros”,
y se refiere a los judíos legalistas que judaizaban a los cristianos por medio
de la circuncisión diciendo que esa era la única forma de agradar a Dios y
pertenecerle a Él, Pablo también les llama malos obreros y mutiladores del
cuerpo, porque no tenían intensión de edificar en Cristo sino de destruir y
edificar bajo una conducta moral externa:
Filipenses 3:2 Guardaos de
los perros, guardaos de los malos obreros, guardaos de los mutiladores del
cuerpo. 3 Porque nosotros somos la circuncisión, los que en espíritu
servimos a Dios y nos gloriamos en Cristo Jesús, no teniendo confianza en la
carne.
Dicho de otro
modo, Pablo les está diciendo; cuídense de aquellos que quieren hacer de la
vida cristiana una vida religiosa y legalista privada de Dios (ellos no conocen a
Dios, por eso les llama perros, lo cual era una forma despectiva de dirigirse a
los que eran ajenos al pueblo de Dios, al principio los judíos eran el pueblo
de Dios y los gentiles eran los perros, y para este tiempo los perros eran
animales no domesticado, por tanto vivían de la basura, de los desperdicios,
comían carroña, y en el sentido espiritual esa era la condición de los gentiles
sin Dios, comían de la basura de la idolatría, se alimentaban de la carroña de la
inmoralidad, pero venia la Gracia de Dios por medio de Jesucristo los gentiles
fueron hechos hijos y los judíos que rechazaron la Gracia fueron transformados
en perros, ahora ellos estaban fuera de la casa de Dios, eran los perros que se
alimentaban de la carroña del legalismo y de los desperdicios de la
justificación por obras, se habían invertido los roles), estas personas (estos
perros) piensan que pertenecer a Dios se trata de una marca externa como la circuncisión física y una serie de conductas, sin embargo Pablo aclara que la
vida cristiana es espiritual, es una marca interna del Espíritu de Cristo en
nuestras vidas, y nuestro culto y reverencia a Dios, y a eso se refiere la palabra servicio en este pasaje”, es en el
Espíritu desde nuestro interior, y nuestro gozo y satisfacción no procede de
nuestro logros humanos para agradar a Dios sino de la obra expiatoria de Cristo
en la cruz;
Estos judaizantes
se jactaban de llevar la marca de la circuncisión como señal de pertenecer a
Dios, pero en lo interior no tenían idea de quién era Dios, y ¡cuántos cristianos hay hoy en la misma
condición!, que tienen marcas externas como el bautismo en agua (como un tatuaje) y una serie de
conductas religiosas pero no conocen a Dios, ignoran la obra regeneradora del
Espíritu Santo, no pueden encontrar gozo en la obra
de Cristo en la cruz porque son esclavos de sus propias reglas, pero
Cristo no es religión, Cristo no es legalismo, Cristo no es un conjunto de
normas a seguir, Él no es un estilo de vida sino que Él es la vida reproducida en
nosotros por medio de su Espíritu y esa es nuestra circuncisión, esa es nuestra
marca… está diciendo Pablo.
Col 2:11 En él también fuisteis circuncidados con circuncisión
no hecha a mano, al echar de vosotros el
cuerpo pecaminoso carnal, en la circuncisión de Cristo;
Ro 2:29… y la circuncisión es la del corazón, en espíritu, no
en letra; la alabanza del cual no viene
de los hombres, sino de Dios.
Una experiencia infructuosa
Ahora, en lo que
se refiere a esa vida legalista y rigurosa Pablo había experimentado en carne
propia los efectos de una religión ortodoxa pero sin frutos, en su apariencia
externa él había sido el mejor seguidor de Jehová, pero en lo interior no tenía
ni idea quien era Dios:
Filipenses 3:4 Aunque yo tengo también de qué confiar en la carne. Si
alguno piensa que tiene de qué confiar en la carne, yo más: 5 circuncidado al octavo día, del
linaje de Israel, de la tribu de Benjamín, hebreo de hebreos; en cuanto a la
ley, fariseo; 6 en cuanto a celo,
perseguidor de la iglesia; en cuanto a la justicia que es en la ley,
irreprensible. 7 Pero cuantas cosas
eran para mí ganancia, las he estimado como pérdida por amor de Cristo. 8 Y ciertamente, aun estimo todas las
cosas como pérdida por la
excelencia del conocimiento de Cristo Jesús,
mi Señor, por amor del cual lo he perdido todo, y lo tengo por basura, para
ganar a Cristo,
Pablo era un hombre erudito, instruido en la
sabiduría religiosa de los hombres más celosos de la costumbres hebreas, era un
nacionalista defensor de su cultura, un teólogo respetado de esos tiempos,
envidiado por lo irreprensible que era en cuanto a la ley (no que no competía pecado, sino que guardaba todas los preceptos de la
ley para la justificación por obras, es decir; si pecaba inmediatamente
procedía de acuerdo a la ley para expiar el pecado), se podría decir que Pablo
tenía todo lo que un judío deseaba excepto a Dios… entonces él no tiene nada
Él solo tiene basura acumulada a su alrededor,
y todo lo que para los hombres es valioso delante de Dios es basura, son trapos
inmundos (son pañales sucios). A un
lado de la balanza pone su linaje, su nacionalidad, su
cultura, su prestigio, su educación, su religión, sus logros personales, pero
cuando en el otro lado de la balanza pone a Cristo entonces él no tiene nada,
el solo tiene basura, cosas sin valor, entonces decide desechar todo lo que
tiene para ir por Cristo, desechar todo para ganar a Cristo, no está haciendo un intercambio, el esta desechando lo
que tiene para ir en busca de lo que no tiene sin saber si lo alcanzara.
Pablo encontró en
Cristo una ganancia insuperable, un tesoro invaluable tal como la parábola del
tesoro escondido (Mt 13:44) hasta
podríamos decir que Pablo personifica la parábola “del tesoro escondido”, porque en cuanto oyó su voz fue
desesperadamente en busca de Cristo e hizo de Cristo su meta personal, ahora
buscaba que Cristo sea su ganancia, que Cristo sea su tesoro, que Cristo sea su
reputación, que Cristo sea su gloria, que Cristo sea su prestigio, que Cristo
llene todo en su vida lo que implicaba perderlo todo en la carne, fue
desheredado de sus parientes, rechazado por sus antiguos amigos y perseguido
por sus compatriotas. Sin embargo Pablo solo tenía una meta objetiva en su
vida.
Una
búsqueda desesperada
Filipenses 3:9 y ser hallado
en él, no teniendo mi propia justicia,
que es por la ley, sino la que es por la fe de Cristo, la justicia que es de
Dios por la fe; 10 a fin de conocerle, y el poder de su resurrección, y la participación de
sus padecimientos, llegando a ser
semejante a él en su muerte, 11 si en alguna manera llegase a la
resurrección de entre los muertos.
El Pablo que todos
los judíos conocían dejó de existir (Saulo
dejo de existir), no estaba más, se despojo de todo cuanto tenia, cambio de
casa, cambio de amigos, cambio de familia, cambio de lugar y ¿donde está ahora Pablo? Esta en Cristo, se halla en Cristo, y lo único que desea
es ser hallado en Cristo siempre, aferrado a la gracia de Cristo, aferrado a la
cruz de Cristo, aferrado a la justificación por la fe, aferrado a la suficiencia
de la sangre del Cordero de Dios derramada en aquella cruenta cruz, porque sabe
que nada mas va a justificarlo para con Dios, y continua diciendo: a fin de
conocerle, y el poder de su resurrección, y la participación de sus
padecimientos, llegando a ser semejante a él en su muerte…
Está hablando de
conocerlo en intimidad, Pablo quiere experimentar a Cristo todo cuanto pueda en
esta vida, sabe que conocerlo es más que saber una doctrina de Él, quiere
entender y participar de sus padecimientos, quiere incluso experimentar su cruz
a fin de experimentar también con Cristo la resurrección de entre los muertos, dicho
de otro modo; Pablo está decidido a sumergirse en Cristo, a indagar las
profundidades de las riquezas de la gracia y de la sabiduría de Cristo y descubrir
los misterios de tan sublime que se esconden de esta verdad, a fin de conocerlo…
Antes de Cristo él
podía jactarse en su sabiduría, en su conocimiento, en su prestigio, en su celo
para con Dios, pero no podía jactarse de conocer a Dios, ahora quiere conocer a
Dios, quiere ir en pos de Él a fin de conocerlo y poder gloriarse en ello, y
degustar de lo que el profeta Jeremías expresa en su libro…
Filipenses 3:12 No que lo haya alcanzado ya, ni que ya sea perfecto; sino que prosigo, por ver si logro asir aquello
para lo cual fui también asido por Cristo Jesús. 13
Hermanos, yo mismo no pretendo
haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando
ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está delante, 14 prosigo a la meta, al premio del
supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús. 15 Así que, todos los que somos perfectos, esto mismo sintamos; y si otra cosa sentís, esto también os lo revelará Dios.
16 Pero en aquello a que hemos
llegado, sigamos una misma regla, sintamos una
misma cosa. 17 Hermanos, sed imitadores de mí, y mirad a los que así se conducen según el ejemplo que
tenéis en nosotros.
Esto mismo sintamos… en estos últimos versículos Pablo busca persuadirnos, contagiarnos de
su sentir, busca que sintamos lo mismo que él siente por Cristo, busca
motivarnos para emprender la misma carrera que él ya está corriendo, busca que
le imitemos porque él es un fiel imitador de Cristo; 1°Co 11:1 Sed imitadores de mí,
así como yo de Cristo. Básicamente les dice a sus oyentes; vayan en pos
de Cristo, despójense de todo lo que les estorba, hagan de sus vidas una
carrera para conocerlo a Él, para entenderlo a Él, para comprender su obra en
la cruz pero de una forma tan intima y personal que terminen deseando su cruz
en todos los sentidos, para discernir el poder de su resurrección e imitarlo en
el sentido más profundo que le es permitido al hombre poder interpretar a Dios…
Y él va a utilizar
una palabra más para expresar su sentir por Cristo; “asir” aquello para lo cual fui asido por Cristo. Asir significa
empoderarse o apoderarse, tomar posesión de algo, alcanzar algo, y es la misma
palabra que en el verso 13 se traduce como “alcanzado”,
lo cual si la reemplazamos Pablo en el verso 13 nos está diciendo; hermanos, yo
mismo no pretendo haberlo asido ya, pero una cosa hago… prosigo a la meta,
y esta última expresión que no es otra cosa sino; “persigo la meta” entonces; –yo mismo no
pretendo haberlo asido ya, pero lo persigo… lo persigo como mi meta–
Aplicación Actual
En virtud de esto
la vida del cristiano puede interpretarse también como una carrera por
conocerlo a Él, y hasta podríamos decir que de eso se trata nuestro peregrinar en
este mundo, porque mientras más lo conozco mas lo admiro, y mientras más lo
admiro mas quiero adorarlo, y mientras más lo adoro mas quiero imitarlo, y
mientras más lo imito más le obedezco, y mientras más le obedezco mas glorifico
su Nombre, y mientras más le glorifico más es magnificado Cristo en mi cuerpo o
por vida o por muerte (Fil 1:20)…
Hermanos, necesitamos
conocer a Jesús o estamos muertos, necesitamos perseguirlo para que nuestra
vida cobre sentido eternal, necesitamos buscarlo hasta hallarlo, tanto en lo
personal como en lo grupal, necesitamos entender y conocer a Jesús en una
comunión mas intima con Él…
Ruego que el Señor
ponga esta necesidad en nosotros como una sed insaciable que nos conduzca
desesperadamente a la fuente de agua viva (Jn 7:37),
que seamos atraídos hacia él como así como es atraído el metal por un gran imán
(Jn 12:32), que le busquemos aun por la
noches como lo declara el cantar de los cantares (Cnt
3:1-4), que le busquemos por las mañanas como lo declara el salmista
(Sal 5:3, 88:13, 119:147)…
Isaías
26:9 Con mi alma te he deseado en la noche,
y en tanto que me dure el espíritu dentro de mí, madrugaré a buscarte…
La vida cristiana
no se trata solo de ser mas santo, sino de encontrar a Jesús, nuestra vida no
es simplemente una lucha contra el pecado sino encontrar a Jesús. El único
actor principal de esta dramática película del camino angosto es Jesús. Ahora,
es probable que alguno diga; “yo pienso
que ya le conozco” pero su vida siga el mismo curso que antes sin sufrir
ningún cambio, entonces debo considerar que el tal es mentiroso (1°Jn 2:4) y no le conoce en ese grado
de intimidad del que estoy hablando, porque es imposible que un hombre conozca
verdaderamente a Jesús y no caiga rendido a su pies y sea trasformado en virtud
de su carácter y corra hacia Él, es inevitable.
Aquel hombre que
descubrió el tesoro escondido fue y vendió todo cuanto tenía con gozo y vino y
tomo posesión de ese tesoro, su vida cambio radicalmente por aquel invaluable tesoro.
Es nuestro turno de personificar esa parábola.
Juan 17:3 Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios
verdadero, y a
Jesucristo, a quien has enviado.
Y otra vez aquí la
palabra “conocer” está haciendo
referencia a conocerle en un sentido experimental, en un sentido de comunión
intima, en un sentido de manifestación espiritual que transforma la vida de las
personas a la imagen de Cristo.
Conclusión
¿Por qué hablo de este tema? ¿Qué me propongo
con esta meditación? Estoy plenamente convencido que la vida cristiana es mucho
más profunda de lo que hasta aquí la hemos vivido, y entiendo que solo tenemos
esta vida y los pocos años que nos quedan de ella para poder conocer a Jesús en
la plenitud de su Espíritu… vengo a pedirles que corramos juntos esta carrera hacia
Cristo, vengo a proponerles que seamos los atletas de Cristo de este siglo (de esta era), vengo a sugerirles que encontremos
la virtud de asirnos de Él mientras haya tiempo (y oportunidad), vengo a pedirles que vayamos en pos de Él a fin de
conocerle.
Filipenses 3:18 Porque por ahí andan muchos, de los cuales os dije
muchas veces, y aun ahora lo digo llorando, que son enemigos de la cruz de Cristo;
19 el fin de los cuales será
perdición, cuyo dios es
el vientre, y cuya gloria es su vergüenza;
que sólo piensan en lo terrenal. 20 Mas nuestra ciudadanía está en los cielos, de donde también esperamos al Salvador, al Señor
Jesucristo; 21 el cual transformará
el cuerpo de la humillación nuestra, para que sea semejante al cuerpo de la
gloria suya, por el poder con el cual puede también sujetar a sí mismo todas
las cosas.
1°Juan 2:28 Y ahora,
hijitos, permaneced en él, para que cuando se manifieste, tengamos
confianza, para que en su venida no nos alejemos de él avergonzados.
Salmos 73:25 ¿A quién tengo yo en los cielos sino a ti? Y fuera de
ti nada deseo en la tierra. 26 Mi
carne y mi corazón desfallecen; Más la roca de mi corazón y mi porción es Dios
para siempre. 27 Porque he aquí, los que se alejan de ti perecerán; Tú destruirás a todo aquel que de ti se aparta. 28 Pero en cuanto a mí, el acercarme a Dios es el bien; He puesto en Jehová el Señor mi esperanza, Para contar
todas tus obras.
La paz del Señor Jesucristo.-
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